jueves, 4 de julio de 2013

Un Paño Negro

De los miles de visitantes que diariamente irrumpen en Marin_Falierlas grandes salas del Palazzo Ducale veneciano, pocos advertirán un discreto detalle en la decoración de la Sala del Mayor Consiglio, la estancia más majestuosa del viejo edificio.

Dicha sala se halla decorada con los grandes hitos y victorias  de la historia de la Serenísima, pintadas por los mejores pintores venecianos. Destaca el gigantesco Paraíso obra de Tintoretto, todo un prodigio de grandiosidad. Justo debajo del techo podemos ver retratados a todos los Dux de Venecia que en la historia fueron. Estos retratos forman una largar serie que cubre todo el perímetro del salón. No son demasiado visibles, pero si hacemos un pequeño esfuerzo podremos leer las inscripciones laudatorias que acompañan a cada uno de ellos.

Sin embargo, si observamos atentamente, veremos que al fondo a la izquierda, falta un retrato. Bien, la realidad es que no falta, sino que en su lugar se ha representado una especie de sábana negra que cubre la zona donde teóricamente tendría que verse la efigie de un dux. Sobre el paño podremos leer una inscripción en latín en letras doradas:

“HIC EST LOCUS MARINI FALETRO DECAPITATI PRO CRIMINIBUS”

(Este es el lugar de Marin Falier, decapitado por sus crímenes)

Detención del dogo Falier, según la versión decimonónica de Francesco HayezPues bien, este es uno de los más célebres casos de damnatio memoriae de la historia. El castigo que un estado aplica a los traidores más allá de la muerte: la condena al olvido.

¿Quién fue Marino Falier? ¿Qué gran crímen cometió para que su propia patria condenara su memoria después de haberlo elevado a la más alta dignidad de la República? Para saberlo tenermos que retroceder nada menos que al siglo XIV. Estamos en el más glorioso período de la historia veneciana. Los barcos de la Serenísima dominan las principales rutas comerciales del Mediterráneo y aportan continuamente grandes cantidades de riqueza a la ciudad de los canales. Marino Falier es uno de los más destacados aristócratas por su riqueza y por sus grandes servicios al estado. Ha sido general victorioso de sus ejércitos y afortunado diplomático en la Corte Papal de Avignon. Cuando en 1354 el dux Andrea Dandolo fallece hay un gran consenso a la hora de elegir a su sucesor, que no es otro que el respetado senador Falier.

Eugène_Ferdinand_Victor_Delacroix_Ejecución del dogo Marino FalierSin embargo, la situación en Italia era cada vez más inestable por aquellos días. La mayoría de las ciudades vecinas habían abandonado el sistema oligárquico y republicano para ponerse en manos de hombres fuertes que asumían el poder y se arrogaban títulos y prebendas de carácter principesco. Tal vez Falier concibiera en su cabeza la idea de que lo que Venecia necesitaba era el gobierno de un hombre fuerte. Lo cierto es que la Historia le atribuye motivos más triviales a su intento de hacerse con el poder en su patria. Se dice que concibió un gran odio a las más alta nobleza veneciana (a la que por otra parte él mismo pertenecía) a consecuencia de una ofensa cometida contra su esposa por un joven aristócrata, y que no había sido castigada a su satisfacción.

El caso es que el viejo dogo organizó una conspiración junto a otros descontentos con el poder de la oligarquía y fijó para el día 15 de abril de 1355 la ejecución de su plan, que consistía básicamente en atraer a sus enemigos a la Piazza de San Marco, delante del Palacio Ducal, para eliminar a los principales representantes del stablishment veneciano y dejar descabezado cualquier intento de resistencia. Acto seguido, el viejo Falier sería proclamado Príncipe de Venecia.

Marino_FalieroLo que ocurrió es que varios de los conjurados no guardaron la necesaria circunspección y las noticias del complot llegaron pronto a oídos del Consejo de los Diez, la instancia secreta que controlaba una gran red de espionaje fuera y dentro de la propia Venecia. Reunidos en secreto, abrieron una rápida investigación que dejó bien a las claras el grado de implicación del propio dogo en la confabulación.

El día previsto para la toma del poder amaneció con los puntos neurálgicos de la ciudad tomados por las fuerzas del gobierno y con diez de los confabulados colgados de las ventanas del Palacio Ducal. Marino Falier fue arrestado y juzgado sumarísimamente. El anciano reconoció todos los cargos y asumió su fatal destino. El día 18 fue llevado al patio interior del palacio y fue despojado de todas las insignias de poder. Después fue decapitado y su cadáver expuesto para público escarnio. Todos sus bienes fueron confiscados excepto una cantidad para su viuda.

Venecia eligió rápidamente un nuevo dogo y borró de la memoria histórica al hombre que había intentado acabar con la República a pesar de haber sido elevado a la máxima dignidad. Algunos años después de su muerte se ordenó borrar su efigie del friso de los dogos y cubrirlo con el paño negro que ahora vemos. Si no hubiera sido así, su rostro miraría, a modo de cruel ironía, el maravilloso espectáculo de los bienaventurados que disfrutan de la vida eterna en un el Paraíso que años después Tintoretto pintó para mayor gloria de Venecia.

paradiso-tintoretto

No hay comentarios:

Publicar un comentario